Reflexiones que no llegan a ser existenciales


Si tuviera algo interesante para poner en el blog ya lo hubiese hecho ¿no le parece?

Haciendo Catarsis



¿No odian la humedad y sus efectos corrosivos en la garganta?…yo si, por eso escribo en lugar de hablar

Reflexiones que no llegan a ser existenciales

Cuando se dice que alguien muere por causas naturales se deja a entender que la naturaleza entonces en una homicida.

Haciendo Catarsis


Me molesta la gente que postean cosas en ingles y los demás comentan demostrando que entendieron perfectamente lo que dice mas arriba, y creyendo muy internamente, que son mejores que otros por eso…a todos uds…fuck you!

Breves conversaciones de la vida cotidiana


A: Opa que hacelga? Que se cuenta? Todo bien?

B: De a una pregunta por favor

A: Jajajaja si es verdad, todo bien?

B: Que es todo bien?

A: Jajaja, eso si tus cosas en la vida van bien?

B: Y que entendes por bien?

A: Jaja, y que no esten mal

B: y eso no explica que es estar mal

A: ja, bueno eso, que estes feliz

B: que es feliz?

A: Ta, anda a la puta que te parió, sorete ojala te mueras

B: Eso te pasa por hablar con un estudiante de psicología



Reflexiones que no llegan a ser existenciales


El mate es inviable en un país con terremotos

Haciendo Catarsis

Me molesta la gente que usa Facebook (por transitiva, me molesto yo)

Breves conversaciones cotidianas (3)

P: te veo bien

F: si, por suerte. Igual mucho no me ilusiono, viste como es

P: ja…siempre tan optimista vos

F: realista

P: si si claro, “realista”…(risa)…che, nada que ver, pero ¿por que no reclinas el asiento para viajar un poco mas cómodo?

F: Porque seguramente no se recline, y prefiero evitar el sufrimiento de la derrota al intentar hacerlo y no conseguirlo

P: Ahí va otro pensamiento “realista”

F: En serio, ¿para que gastar esfuerzo en algo que sabes no va a poder ser?

P: Y como lo sabes?

F: Por estadísticas. El 99% de las veces que lo he intentado, he fallado. ¿que te hace pensar que esta vez va a ser diferente?

P: Que te veo bien

F: Y??

P: O sea, ¿que preferís viajar incomodo a intentar reclinarlo para evitar sentirte un perdedor?...no si, un razonamiento muy lógico el tuyo

F: Lo es

P: Estaba siendo irónica

F: Pero si las cosas siempre te salieron mal, hay como mas probabilidades que te sigan saliendo mal

P: No si cambias algo

F: Como que?

P: Intentar

F: Intentar que?

P: Reclinarlo

F: No, ya te dije, no va a funcionar.

P: Si vos decís

F: En fin… y al final , ¿tocan hoy los Buenos Muchachos?

P: Creo que si

F: ¿es gratis?

P: Por lo que me dijeron no

F: ¿y con quien tocan?

P: solos creo

F: d+  entonces…...................uia…

P: ¿Qué?

F: Se reclinó

Reflexiones que no llegan a ser existenciales


En el día de hoy más que una reflexión, una duda que no llega a ser existencial:

 ¿Alguien sabe por que los fines de semana la gente elije ir a boliches y muy amablemente donar la mitad de sus sueldos solo en el precio de la entrada, para ingresar a espacios por lo general muy pequeños y cerrados, donde la capacidad de personas se ve ampliamente superada, y te resulta casi imposible no solo moverte, sino además cumplir funciones básicas para la supervivencia como ser la respiración por ejemplo?

                                                   O

¿Por que una vez dentro, y no conformes con haber perdido gran parte de sus bienes materiales, deciden comprar una cerveza y/o trago, que te sale lo mismo que adquirir acciones en Google y quedarte con el 40% de la compañía?

¿Siendo que ello no es la única opción, y que por el contrario existen otro montón de alternativas, no solo más baratas, sino más inteligentes. Pues además de permitirte respirar sin dificultades y de otorgarte la libertad de movimiento necesaria para todo ser vivo, evitas actuar como ganado o seres primitivos-no pensantes (algo por cierto necesario a los tiempos modernos que nos corren)?

No se, la verdad tengo mis teorías al respecto, pero aun me sigue resultado una de las interrogantes más grandes de la humanidad...junto a:

La noción relativa de espacio-tiempo propuesta por Einstein
La existencia de Dios
Los ingredientes de las hamburguesas de Mc Donald’s
Los efectos secundarios de beber Freskita
Y que haya personas que realmente miran programas de TV nacionales como “Esta boca es mía”

Cuentos Z - Un simple plan (parte III - final)

Era el sonido indescriptible y agonizante de un zombie, mezcla de dolor y padecimiento. Ahora solo restaba saber donde se encontraba exactamente.
Al hacerse la luz, de la nada, apareció ante él un rostro putrefacto al cual le faltaba un ojo, y al parecer también sus labios. De su boca se erguían asquerosamente algunos dientes de un color verde-amarillento y su nariz parecía estar rota. El color de piel oscilaba entre el marrón y el amarillo, y emitía un sonido casi tan putrefacto y perturbador como el hedor que emanaba de todo su cuerpo.
Su primer reflejo fue empujarlo, pero solo con eso no bastó para alejarlo más que unos pocos centímetros. Una vez más su luz se diluyó. Casi de forma refleja e instintiva corrió pegado a la pared lo más alejado posible del muerto viviente, del cual pudo sentir el frío y áspero roce de sus dedos sobre su mejilla.
 Era tanta su velocidad que para cuando se dio cuenta, se había topado con las nuevas escaleras, y fue por ello que no tuvo otra opción más que caer de forma rápida y violenta por las mismas.

Entre la oscuridad, el mareo, el dolor de la caída, y el miedo, poco era lo que podía hacer, más que intentar ponerse de pie y reaccionar ante algún nuevo peligro que se pudiera suceder en la planta baja del hotel. Al menos aquí pudo divisar la puerta al final del hall, y como desde ella ingresaba un poco de luz natural tan necesaria para ese momento.
Empezó a avanzar como pudo, tambaleándose hacia los costados, intentando no perder el  frágil equilibrio que había conseguido. Para cuando llegó a la mitad del hall, la visibilidad ya era mayor. De cualquier manera y habiéndole sobrado tres cerillos, decidió encender uno nuevo.
Al hacerlo notó algo que lo paralizó. Al menos una docena de zombies habían alrededor de él. Caminantes que aun no se habían percatado de su presencia. De pronto y casi sin darse cuenta, uno lo atacó por atrás.
Forcejeó y logró desprenderse de ese, pero tenía a cinco más que venían de frente. Por supuesto, la luz artificial ya se había apagado. De cualquier manera tenía la puerta de entrada aun visible y sabía que de orientarse en esa dirección habría chance de escapar de allí con vida.
Corrió en dirección recta, mirando hacia sus costados de forma frenética y nerviosa. La sudoración caía por su frente y le hacía arder los ojos, disminuyendo su ya escaso alcance visual. A los pocos pasos chocó de lleno contra un nuevo zombie.
A diferencia del muerto viviente él logró incorporarse rápidamente y volvió a correr. Sintió como un par de manos estiradas intentaban retenerlo pero se deshizo de ella a fuerza de empujones y puñetazos sin dirección alguna.



Etapa 2
Atravesar la plaza


Al fin había logrado salir del hotel. De pronto la luz tan anhelada se había convertido ahora en un nuevo obstáculo. Pues el sol del mediodía de un verano de cielo despejado, le anuló la visión por completo. Se refregó los ojos con la palma de sus manos queriendo recuperar la necesaria vista lo antes posible. Pues sabía muy bien que adentro del hotel un grupo de zombies iba por él, y que a plena luz del día los que deambulaban por la calle harían lo mismo.
En ese instante recordó que en su mochila había unos lentes de sol e inmediatamente se los colocó. Hizo un paneo rápido de la situación y pudo ver que la fase dos del plan se había complicado. Al menos a simple vista se podían contar casi cincuenta zombies por las calles, muchos más de lo que había calculado desde el 203. De pronto, todos ellos estaban interesados en su presencia y hacia él se dirigían. Pero el plan seguía siendo el mismo, atravesar la plaza en busca de la bicicleta.
La velocidad (pensaba para si), es una de las ventajas que tenemos sobre ellos. Más al llegar al centro de la plaza, una vez más se dio cuenta de lo pésimo que es contando cosas. Lejos de ser diecinueve, parecía haber más de cien zombies que venían de diferentes direcciones y que lo estaban cercando en el centro de la plaza.
Como salidos de la nada, de pronto los cien pasaron a ser casi quinientos, y de ahí en más era muy difícil contar si el número ascendía a mil, o incluso si lograba pasar esa cifra.
Su reacción fue quizás no la más inteligente de todas.

Viéndose rodeado vio a sus espaldas un monumento al héroe del pueblo. Un simple busto que estaba como a tres o cuatro metros del suelo. Pensó en escalarlo y le pareció la única salida posible. Al hacerlo, su suerte ya estaba echada. Pronto la horda de zombies lo había rodeado alrededor del monumento, con sus brazos extendidos hacia él queriendo un poco de su carne. Para donde mirara había zombies y no tenía forma de bajar de allí sin ser devorado.
Trepado y agarrado con uñas y dientes al rostro de bronce y cobre de vaya a saber quien, temblaba de miedo, mientras sus pantalones ahora manchados con excremento y orín le indicaban que todo estaba perdido. Un simple plan se había complejizado más de lo pronosticado, y las consecuencias de no preveer ese tipo de cosas pueden ser letales.
Gritó tan fuerte como sus pulmones se lo permitieron, ahogado en un llanto mezcla de bronca, impotencia y miedo.
 Debajo de él, cientos de manos abiertas esperaban su caída.

Cuentos Z - Un simple plan (parte II)

Etapa 1
Salir del hotel

Revisó una vez más su mochila, chequeando por última vez que el inventario sea el correcto.
 En ella tenía todo lo que a su criterio era de vital importancia cargar, dentro de lo que había para ofrecerle en la habitación 203.

Equipaje:

Toalla y jabón (para limpiarse el rostro y las zonas vulnerables al contagio en caso de ser salpicado por sangre), un tenedor y un cuchillo de mesa (con los cuales supondría atacar a los ojos de los zombies si estos se le acercaban lo suficiente), unos 3 o 4 metros de cable (que alguna vez sirvieron para ver televisión), y unas sábanas (en caso de que las noches  veraniegas a la intemperie se pusieran frías). A eso se le sumaban, dos botellas de medio con agua mineral, cuatro latas de gaseosa, y un sándwich de jamón y queso, o al menos lo que quedaba de el. Además de ello, en su mochila ya habían pertenencias suyas que tenía desde antes de quedar encerrado allí. Un pantalón y un buzo deportivo, unos lentes de sol, protector solar, una bermuda asquerosamente tropical, un par de chancletas, su billetera con dos tarjetas de crédito y su reproductor de mp4. 

Cerró la mochila, se colocó el buzo deportivo con capucha. Encendió su reproductor, y buscó en el setlist alguna canción los suficientemente “heavy” como para estimularlo en lo que le esperaba. “Die die die my Darling” de los Misfits, fue lo mas adecuado para el momento.

Se armó de valentía, respiró profundo, y abrió la puerta de la habitación.

Asomó su cabeza primero con la intención de poder ver si había alguien más en el corredor. Pero no había luz alguna que le permitiera divisar más allá de unos pocos centímetros enfrente de sus ojos. Eso le despertó un nuevo dilema hasta el momento no tomado en cuenta; la oscuridad del hotel.
La luz eléctrica había sido cortada hace ya mucho tiempo, pues seguramente los encargados de ellos ahora estaban deambulando por las calles del pueblo en busca de carne fresca.  
     Cerró rápidamente la puerta y buscó en la habitación alguna linterna, vela, encendedor o similar. Si bien afuera era de día, en los pasillos del hotel donde no había ventana alguna, eso daba igual. Buscó en la cama, en el baño y en las mesas de luz, hasta que al final logró encontrar una caja de fósforos.
Al abrirla notó que solo quedaban unos pocos (seis para ser más exactos), pero no parecía haber otra alternativa mejor, así que una vez más tomó aire y salió al corredor. Encendió el primer fósforo y lentamente fue girando hacia su derecha intentando poder tener un panorama claro de la situación. No parecía haber nadie allí más que él. Vio al final del corredor las escaleras y hacia ellas se dirigió
No alcanzó a dar tres pasos cuando el fósforo ya se había consumido, por lo que tuvo que hacer el resto del trayecto, aproximadamente unos nueve o diez metros, totalmente a oscuras. Tanteando contra la pared se topó con las escaleras, y allí encendió el segundo cerillo. Nada parecía haber tampoco allí, así que bajó lo más rápido que pudo.
Para cuando llegó al primer piso algo no andaba bien. Sin hacer uso de la luz podía sentir que había alguien más, lo podía oler. En ese momento decidió apagar su mp4 por un instante, y fue ahí cuando lo escuchó.

Cuentos Z - Un simple plan (parte I)


Un simple plan

Miró por entre las rendijas de la persiana y pudo divisar a doce de ellos deambulando por la plaza. Observó más detenidamente y la suma ascendió a diecinueve. Esos sin contar los que habría en el edificio, y los que su campo visual no lograba mostrarle desde el segundo piso del hotel.
     Necesitaba la bicicleta, pues sabía que a pie y con el peso de la mochila iba a perder una de las dos ventajas que se tienen con respecto a los zombies: velocidad. La otra en algunos humanos es discutible, pero se supone que en nuestra condición de seres pensantes la poseemos, la inteligencia.

     Pensó en varias oportunidades tomar un auto, pero el tiempo que le llevaría encenderlo sería el suficiente como para que un grupo importante de caminantes lo rodearan y se sirvieran de él como si fuese la cena.
     Se autoconvenció también que cualquier vehiculo que necesitase gasolina para su funcionamiento, se iba a convertir tarde o temprano en una molestia. Así que lo mejor sería encontrar algo rápido, liviano y sin consumo de gasoil.

Al menos desde su óptica eso resultaba una gran idea.

     El plan parecía a priori ser bastante simple, pero no por ello dejaba de ser peligroso.
Debía descifrar como hacer para descender por las escaleras del hotel sorteando vaya a saber uno cuanta cantidad de zombies. Para luego enfrentarse a los que deambulan por las calles, atravesar la plaza, hacerse del rodado y salir huyendo del lugar.
     Su particular personalidad neurótica-obsesiva le hizo dividir la misión en tres etapas

Reflexiones que no llegan a ser existenciales


¿desde cuando “andate a cagar” es un insulto?

¿acaso “irnos de cuerpo” no es algo placentero?

Vamos!, sincerémonos!

¿cuantas veces nos ha pasado de morir de ganas por “despedirnos de un amigo del interior”, y al hacerlo, sentimos un alivio importante?

¿se supone que eso me tiene que ofender?
¿sentir alivio?


No sé, para mi “andate a cagar”,  me suena más a consejo de tía-abuela que se preocupa por la salud y el transito intestinal de su prójimos.


(Fuente: Sabrina y Joaquin, al menos creo que con ellos fue que hable de este temún existencial, perdón por ensuciarlos gratuitamente si no eran uds muchach@s)

Breves conversaciones cotidianas (2)


- Y?, como te fue?

- pah… creo que mal

- por?, estuvo salado?

- fua… re jevi

- que te preguntaron?

- y…muchas cosas en realidad

- pero habías estudiado?

- y en realidad como que nunca se estudia lo suficiente

- ta, pero las básicas al menos?

- esas las tenía si, ya después si me pedías que profundizara un poco mas, taba pintado

- payada digamos

- exacto, mucho paye, mucha improvisación,…pero ojo, que algunas cosas las tengo bien hechas

- o sea que en algunas ligaste?

- y si; sin un poco de suerte vas al muere

- yo lo estoy por dar todavía

- aha….

- si, pero ta, siento que no estoy preparado aun

- en realidad creo que nunca lo vas a estar, tenes que jugartela

- si…puede ser…y cuando te dan los resultados?

- los resultados?

- si, las notas

- las notas?...me perdí, no entiendo

- del examen boludo que acabas de dar ¿Cuándo tenes las notas?

- ¿qué examen? ¿de que hablas?

- del examen que estamos hablando hace como 2 minutos

- Ah no, yo no di ningún examen, yo hablaba de mi vida…

Haciendo Catarsis

Tengo tantas cosas para escribir que me molestan 
que no se por cual empezar....
y eso me molesta mucho

Reflexiones que no llegan a ser existenciales

si tuviera algo inteligente para decir
ya lo hubiese dicho

no espere encontrar ese tipo de cosas
entrando acá



(Fuente: mia..¿se nota no?)

Reflexiones que no llegan a ser existenciales


“…lo que calma es el grito…”   
y el valium intravenoso también 


 (Fuente: parte de la frase es de don Pedro Dalton, la otra "maravillosidad", toda mía)

Haciendo Catarsis

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!




esselente...

La vida de Tincho - Episodio II

Tincho knows his family



Tincho
Despierto
Muchas caras con expresiones mezcla de asombro y descompostura me miran, como sin dar crédito a lo que sus ojos les muestran


Mi madre
Se que es difícil de aceptar. Pero si, pedí antes de irme del hospital que le hicieran unos análisis. Y dio positivo; es un ser humano


Mi hermano
Me pregunto de que raza?


Mi padre
Ese hijo no puede ser mío, ¿con quien te habrás acostado vos?


Mi tía
Y para que saliera una cosa así, con un ornitorrinco muerto aplastado en el medio de la ruta


Mi madre
Pero miren que después de un rato te acostumbras. Además creo que le encontré los ojos. Y son como los de su padre


Mi hermana
¿No es el ombligo eso má?


Mi madre
No, estoy casi segura que es uno de los ojos. Y el otro tiene que estar por ahí cerca


Tincho
Intento abrir el otro ojo para que también lo vean. Luego de varios intento, lo logro


Mi madre
Vieron, les dije, eran sus ojos


Mi tía
¿Y que come esta criatura de Dios?


Mi madre
Eso mismo le pregunte al médico, 
y me dijo que probara con amamantarlo...
¿voluntarios?...
¿no?...¿ninguno?...
está bien, lo voy a hacer yo


Mi padre
¿Y le vas a dar teta?


Mi madre
¿Estas demente vos?,
dame una mamadera, 
que voy a buscar la forma de hacerlo


Mi hermano
¿Y si le dan queso?
En una de esas es pariente de las ratas


Mi hermana
No sean tan ordinarios por favor. Sigue siendo un ser humano...que metieron adentro de una batidora y apretaron el botón de encendido en reiteradas oportunidades. Pero ser humano al fin che.


Mi tía
Yo probaría con dejarlo boca abajo, ahora que sabemos que esos son los ojos y por lo tanto suponemos que esa es su cabeza. Si se queda quieto boca abajo, entonces es un murciélago.


Mi madre
Miren!, esta tomando


Mi padre
Estas seguro que ese no es el ombligo



Mi madre
No imbécil, mirá, toma!...
hasta me parece que lo quiero un poco y todo ahora



Tincho
Me emociono

Haciendo Catarsis

Como me molesta la gente que hace caritas con los signos de puntuación  y letras en Internet

A ver si entienden esta carita?



IMBECILES!!



Gracias por el espacio





Breves conversaciones cotidianas (1)

 - Ohhh que hace Luisito?? como estas? que es de tu vida valor? como están tus cosas? , tanto tiempo che…en que andas?

- muchas preguntas

- jaja, siempre el mismo vos. Yo acá, re tranqui, tirando para no aflojar, viste como es

- No, la verdad es no vi como es…

- Jaja, tal cual, tal cual. Pero ta, es así, hay que hacer algo porque sino perdes. Además ¿te acordas que yo había empezado a estudiar ingeniería?

- No

- si boludo, que íbamos a hacer juntos la carrera

- la verdad que no, y no me interesa

- bueno, la cuestión fue que conocí a Andrea, tenes que conocerla, no sabes lo que es

- sorda me imagino, si te soporta a vos

- Jajaj, que grande Luisitoo; che hay q salir a tomar algo

- contigo ni en pedo

- dale, arreglamos bien entonces para el finde semana que viene ¿te parece?

- No

- impecable che, yo te llamo y vemos después bien donde, me tengo que ir ahora. Una pena que no podamos seguir charlando

- que suerte

- pero estamos en contacto dale

- espero que no

- te llamo

- voy a cambiar mi celular

- jajaja..dale bo, cuidate Luisito

- ojala te pase algo grave





Reflexiones que no llegan a ser existenciales



mientras busco mi media naranja
voy comiendo mandarinas


(Fuente: la encontre googleando, ni idea de quien la inventó, yo seguro no)

La vida de Tincho - Episodio I

Tincho's born




Tincho
Nací
No lloro

Doctor
Señora, si no llora en los próximos 5 segundos
entonces es un tumor


Tincho
Lloro


Doctor
La pucha, hubiese jurado que era un tumor.
Tome señora, todo suyo

(Me entrega a mi madre sujetandome con sus brazos lo mas extendidos posible, como no queriendo que me acerque a su tunica)


Mi madre
¿lo que?...eso?? mío?
No doctor Ud. esta confundido,
yo vine acá a dar a luz a mi hijo; 
no a realizar control de plagas


Doctor
Esto es su hijo señora


Mi madre
¿es 28 de diciembre hoy?
¿me esta jodiendo Ud. dotor?


Doctor
Lamento decir que es en serio

 (mi madre me toma con cara de asco y preocupación)

Mi Madre
¿y que se supone que debo de hacer con esto?


Doctor
Y calculo que criarlo,
es feo y todo, pero debe de crecer.
Seguramente hasta necesite alimentarlo


Mi madre
Y que come una cosa así?


Doctor
Pruebe con amamantarlo, quizás resulte


Mi Madre
Hubiese jurado que con insectos estaba hecho


Doctor
Tal vez, tal vez...
no se puede descartar nada en un caso así


Mi madre
Se supone que debo quererlo también?


Doctor
Sería bueno que lo hiciera.
Se que no lo parece pero estoy seguro que debe de tener sentimientos. Nunca tuvo una mascota ud? Bueno, es parecido a eso...pero mas feo.
Y hablando de eso, en el hospital no se permiten entrar con animales. Así que le vamos a pedir que cuanto antes por favor lo retire del establecimiento...
 por el bien de todos.


Tincho
Dejo de llorar